Cambio Polaridad Terrestre

El debilitamiento gradual del campo magnético de la Tierra es un fenómeno conocido desde hace tiempo. Se estima que en el último siglo y medio ha reducido su intensidad al menos en un diez por ciento, aunque en zonas como la Anomalía del Atlántico Sur está disminuyendo diez veces más rápido que en otros lugares. Según un estudio científico publicado el pasado año en Nature Geoscience, este debilitamiento podría provocar una inminente inversión magnética de los polos.

Nuestra Tierra, al igual que otros planetas del Sistema Solar, posee un campo magnético que se extiende desde su núcleo hasta el espacio exterior, en el que va perdiendo progresivamente su intensidad. Gracias a este campo, el planeta se comporta como un imán gigante con sus dos polos magnéticos, que además se encuentran próximos a los polos geográficos -el polo norte magnético está actualmente a 1.800 kilómetros del polo norte geográfico-.

El campo magnético terrestre forma un escudo protector contra el viento solar, que es el flujo de partículas cargadas de alta energía procedentes del Sol. Y este escudo, que se conoce como magnetosfera, es lo que ha protegido siempre la vida de la Tierra contra gran parte de la radiación que fluye desde el Sol.

La comunidad científica reconoce que las inversiones geomagnéticas son de naturaleza caótica, y que no hay forma de predecirlas. Podrían suceder con carácter inminente o no tener lugar hasta dentro de varios miles de años. Gracias a indicios registrados en los sedimentos marinos, se sabe que en los últimos cinco millones de años, el campo magnético terrestre ha sufrido más de veinte inversiones, la última de las cuales fue hace 780.000 años.

Las consecuencias que podría tener un cambio súbito de los polos magnéticos Norte-Sur, es un tema ampliamente discutido y sobre el que no existe un consenso científico común. Lo que sí es conocido es que el cambio trae consigo un debilitamiento del campo magnético, seguido de un periodo de recuperación y reorganización de la polaridad opuesta.
15 de Febrero, 2001 -- No se puede saber con sólo mirarlo, pero los científicos dicen que el Sol acaba de sufrir un cambio importante. El campo magnético de nuestra estrella se ha invertido.
El polo norte magnético del Sol, que se situaba en el hemisferio norte hace sólo unos meses, ahora apunta al sur. Es una situación poco común, pero no inesperada.
"Esto siempre sucede alrededor de la época del máximo solar," dice David Hathaway, físico solar del Centro Marshall de Vuelos Espaciales. "Los polos magnéticos intercambian lugares durante el apogeo del ciclo de las manchas solares. De hecho, es buen indicio de que el máximo solar realmente llegó".

El campo magnético de la Tierra también se voltea, pero con menor regularidad. Algunos investigadores creen que en nuestro planeta hace ya mucho que deberíamos de haber experimentado una inversión del campo magnético, pero nadie sabe exactamente cuando puede ocurrir.

La galaxia, como toda galaxia tiene en su centro un agujero negro que controla toda la armonía de las estrellas y los astros que le rodean, a su vez en esta existe una región llamada la "fisura oscura" o "la falla negra" que es un gigantesco campo gravitacional, una especie de línea del ecuador de la vía lactea y donde los planetas se ubican o arriba o abajo de esta línea.

Ahora bien, nuestro planeta ha permanecido por mucho tiempo sobre esta línea del ecuador de la galaxia, pero a partir del 2012 nuestro planeta sí o sí tocará esa línea y el proceso tardará de 7 a 11 años para que terminemos de traspasarla por completo.
¿que ocurrirá cuando comencemos a tocar esa línea?
Es lo mismo que exponer un imán pequeñito a un enorme e imponente magneto, comenzará a cambiar la polaridad trayendo consecuencias tremendas

Una grieta gigante en el campo magnético de la Tierra
Dic. 16, 2008: Las cinco sondas espaciales THEMIS, de la NASA, han descubierto una grieta en el campo magnético de la Tierra que es diez veces más grande de lo que anteriormente se pensaba posible. El viento solar puede fluir a través de esta abertura y "cargar" la magnetosfera para que desencadene poderosas tormentas geomagnéticas. Sin embargo, la grieta en sí misma no es la sorpresa más grande. Los investigadores están aún más asombrados por la extraña e inesperada manera en que se ha formado, lo cual da por tierra ideas sobre la física espacial que se han conservado durante mucho tiempo.
"En un principio, no lo creía", dijo el científico del proyecto THEMIS, David Sibeck, del Centro Goddard para Vuelos Espaciales. "Este hallazgo altera radicalmente nuestro entendimiento de las interacciones que tienen lugar entre el viento solar y la magnetósfera".